
La zona de la Merced, ubicada en la calle Manzanares 25, alberga la casa más antigua de la Ciudad de México. . Esta es una propiedad que puede pasar desapercibida con una simple casa antigua, sin embargo es una propiedad llena de historia.
Hay carteles en las paredes que anuncian la lucha, así como un cartel que pide a las mujeres que cocinen en casa. No hay placa o indicación de la historia de la propiedad. Pero esta es la única vivienda en la Ciudad de México que ha sobrevivido del siglo XVI.
Casa histórica que ha resistido la prueba del tiempo.
El edificio data del siglo XVI y la relevancia de la casa radica en su antigüedad y estructura, que es una fusión de dos culturas, la prehispánica y la española. Según José Mariano Leyva, director general del Fideicomiso del Centro Histórico, el inmueble fue una comunidad durante muchos años antes de que pudiera ser utilizado como depósito. Actualmente es propiedad de una organización liderada por Mariano Leiva.
Dentro de un edificio histórico
En el interior, se puede ver que a lo largo de la vida de la casa habrá 16 habitaciones y un patio central compartido. . Históricamente, las casas en ese momento estaban todas ocupadas por familias numerosas, la habitación más grande la ocupaba el padre y el resto lo ocupaban los hijos y los nietos.
De ruinas a edificio de museo
El programa de restauración previsto para el próximo año es financiado por el Fondo Nacional para la Cultura y el Arte con una inversión de 25 millones de pesos;La primera fase del proyecto, que también incluye un rescate comunitario, incluirá un skate park en la zona de San Antonio Abad. El saneamiento será realizado en conjunto por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en colaboración con la Secretaría de Cultura Federal de la Fundación Centro Histórico.
Reconocida como la casa más antigua de la CDMX, la renovación incluirá un museo patrimonial. Entre otros atractivos de la comunidad, se espera que el museo ofrezca actividades para niños y jóvenes como talleres de títeres, teatro infantil y un programa informativo a través de la música.
Como resultado, esta casa, escondida durante cientos de años en callejones, puestos callejeros y bullicio, volverá a la vida para las generaciones futuras.