El cuidado regular de tu hogar, tanto por dentro como por fuera, garantizará un ambiente cómodo y seguro para sus habitantes, y además, evitará la depreciación del inmueble.
Para que su hogar sea cómodo, seguro y totalmente habitable, debe tener una cultura de inspección y mantenimiento constante para que pueda prevenir daños e identificar riesgos antes de que se conviertan en un problema costoso.
No piense que el mantenimiento es algo en lo que solo debe pensar después de que su hogar haya estado en uso durante algunos años;Para evitar su deterioro, es necesario prestar atención desde los primeros meses.
Cómo comenzar la atención domiciliaria
Mantener una vivienda en buen estado depende no solo de la calidad de la construcción y los acabados, sino también de nuestra intervención directa.
Los dos elementos principales para mantener una propiedad en buen estado son la limpieza y el orden. Mantener la casa limpia y ordenada hará que se vea mejor por más tiempo, y si seguimos las reglas generales de uso del espacio, muebles y comodidades, ayudaremos a prevenir el deterioro.
Evita acaparar artículos que ya no necesitas, ya que así será más fácil mantener tu casa ordenada y ordenada.
Ahora bien, cuando hablamos de limpieza, conviene tener en cuenta aquellos rincones u objetos a los que no solemos prestar atención, pero que pueden acumular suciedad con el paso del tiempo;Estamos hablando de aspas de ventiladores, marcos de puertas y ventanas, molduras, filtros de escape, paredes repletas de muebles, despensas y otros rincones a los que las personas no pueden acceder pero que se ensucian de la misma manera.
Resumen de objetos
Los aparatos eléctricos, de fontanería y de gas son probablemente los elementos que más atención requieren a la hora de mantener una vivienda, sobre todo por motivos de seguridad.
Asegúrese de que la iluminación por dentro y por fuera funcione correctamente y esté libre de escombros. Si encuentra que un contacto o interruptor no funciona, asegúrese de repararlo lo antes posible, ya que esto podría provocar una fuga que podría aumentar su factura de electricidad.
Revise los grifos y los desagües, y si encuentra alguna fuga o mal funcionamiento, repárelos de inmediato, ya que tales problemas a menudo conducen a complicaciones más graves y costosas si no se controlan.
Vacíe el tanque al menos una vez al año para evitar que se acumulen sedimentos y entren en las tuberías, ya que la suciedad del tanque puede reducir la presión del agua en el grifo y la ducha.
Si encuentra algún problema complejo en sus instalaciones eléctricas, de gas o de fontanería, se recomienda que un profesional revise y solucione el problema.
Paredes, techos y pisos
Revisar periódicamente el estado de paredes, suelos y techos para detectar humedades, grietas o agujeros que pueden repararse con mayor facilidad si se detectan a tiempo para que no se conviertan en complicaciones que requieran una importante inversión para su reparación.
No olvide que, además de mejorar la apariencia, la pintura y la impermeabilización regulares son dos tareas muy importantes para proteger su propiedad. Antes de pintar, asegúrese de que no haya humedad, si la hay, corrija antes de seguir pintando.
Mantenga los techos limpios y libres de desagües. Evite la acumulación de agua de lluvia, y si esto resulta ser un problema cotidiano, se debe buscar ayuda profesional para abordar el problema subyacente y evitar que la humedad se acumule en el hogar.
Tareas sencillas que te dan dolores de cabeza
- Si tiene un procedimiento de mantenimiento para pequeñas tareas diarias, no contratará a otra persona para que haga las reparaciones. No se trata de una modificación compleja de instalaciones eléctricas, sino de operaciones sencillas como:
- Ajuste cerraduras, tornillos y clavos. Estos elementos se debilitan gradualmente, y si no los revisamos regularmente, esto puede provocar accidentes.
- Tenga cuidado con la lechada cuando limpie azulejos y mosaicos en baños y cocinas, ya que la humedad puede propagar el moho fácilmente.
- Las puertas y ventanas pueden moverse debido al uso constante, por lo que es importante verificar regularmente que funcionen correctamente y que estén completamente cerradas.
- No olvides cuidar tu jardín. Limpie diariamente y evite que el césped, los árboles y los arbustos crezcan sin control, ya que no solo crean una mala apariencia, sino que también pueden provocar la reproducción de moscas y animales.
Otros consejos para el cuidado del hogar
- Inspeccione su hogar al menos dos veces al año para verificar posibles daños antes de que las cosas empeoren.
- Las reparaciones en el hogar deben hacerse lo antes posible para evitar más daños (y costos).
- Haz una lista de las reparaciones y tareas necesarias en tu hogar y prioriza su urgencia para que puedas planificar tus gastos.
- Puedes realizar muchas tareas de mantenimiento sin mucha dificultad, pero cuando se trata de temas delicados como la electricidad o el gas, lo mejor es llamar a un especialista.
Nuestro hogar es a menudo una de las mayores inversiones en nuestras vidas, por lo que es importante mantenerlo en buenas condiciones, lo hará seguro, habitable y, lo más importante, nos permitirá pasar más tiempo en casa.