La estabilidad financiera y la prosperidad no son tus ingresos, sino cómo gastas, ahorras e inviertes, una buena cultura financiera.
A menudo pensamos que si pudiéramos ganar más dinero, estaríamos en una mejor posición. Pero la verdad es que los ingresos por sí solos no determinan el bienestar financiero. Así como adquirimos las habilidades para desempeñar cualquier actividad profesional, debemos desarrollar las habilidades necesarias para administrar eficazmente nuestro dinero.
Según expertos en el tema, la posición financiera consta de los siguientes cuatro componentes:
- Toma el control de tus finanzas diarias y mensuales.
- La capacidad de resistir imprevistos sin endeudarse.
- En el camino hacia el logro de los objetivos financieros.
- Libertad financiera para tomar decisiones para disfrutar de la vida.
Si bien el ahorro es un principio fundamental para comprender y lograr objetivos financieros, es solo el primer paso en la cultura financiera. Tomar las decisiones correctas para aumentar la riqueza, aumentar los ahorros y asegurar la estabilidad futura sigue siendo prerrogativa de muy pocos mexicanos;No porque sea para millonarios, sino porque nuestra sociedad aún enfrenta desafíos en lo que respecta a la cultura financiera.
¿Qué es la cultura financiera?
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la cultura financiera es el proceso mediante el cual comprendemos los diversos productos y servicios financieros y sus riesgos y beneficios.
Además, con esta información desarrollamos habilidades que nos permiten tomar mejores decisiones, lo que conduce a un mayor bienestar económico. Recuerde, cuanto más sepa, mejores serán sus decisiones y menor será el riesgo de sobreendeudamiento.
En México necesitamos una mejor cultura financiera para mejorar la economía de nuestros hogares. Según la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera, solo el 44% de los adultos tiene una cuenta de ahorro formal;Dos tercios de las personas no comparan sus productos o servicios financieros antes de comprar, y el 80% de los adultos con una cuenta de ahorro para la jubilación no saben cuál antes de registrarse.
Pero la educación financiera tampoco es algo que se obtiene por arte de magia.¿Entonces que puedes hacer?
Afortunadamente, en esta era de tecnología digital y abundancia de información, puedes aprender finanzas personales con relativa rapidez.
Primero, los libros y blogs de finanzas personales serán clave para su búsqueda de educación financiera. Aprenda cómo administrar su dinero, cómo invertir, cómo presupuestar y más.
La gestión financiera no tiene por qué ser difícil o aburrida. Gracias a la tecnología, existen muchas herramientas y aplicaciones que pueden ayudarlo con una variedad de objetivos, como hacer un presupuesto, ahorrar, crear un fondo de emergencia o incluso determinar cuánto necesita ahorrar para la jubilación y para comenzar.
Pero además de ayudarte a organizar y visualizar tu vida, estas herramientas también pueden ayudarte a aprender, ya que muchas de ellas tienen blogs, tutoriales y otros materiales educativos.
Los podcasts son muy extensos y hay muchos podcasts geniales para escuchar en cualquier momento.
¿Cuánto sabes sobre tu dinero?
Averiguar si tienes una cultura financiera es relativamente fácil. Marque las cosas que lo representan con una X de la lista a continuación. De esta manera sabrás qué tan bueno eres en la administración del dinero y dónde deberías trabajar más.
Manejas tu dinero de acuerdo a tu presupuesto. Puede lograr metas financieras. Sus ingresos le permiten pagar deudas y ahorrar dinero. Conoces los conceptos básicos del crédito (personal, de deuda, hipotecario, etc.). productos financieros Conoces la importancia de tu historial crediticio Conoces la importancia de la planificación financiera para el retiro
Preocuparse por el dinero no es poca cosa y no tiene nada que ver con la codicia, al contrario, está conectado con el deseo de disfrutar.
Para entender la importancia de la gestión financiera sin parecer mezquino, es necesario tener una cultura financiera, y para ello debemos estar formados en finanzas.
Como ya habrás leído, no se trata de una carrera, diplomados o cursos de contabilidad, sino de entender que el dinero es un medio para que disfrutemos de la vida. Para cuidarlo y dejarlo crecer, debemos hablarlo y educarnos.